
En 2025, a medida que las criptomonedas se consolidan como una parte legítima del ecosistema financiero global, algunos bancos tradicionales en Estados Unidos están adoptando una postura claramente pro-cripto. Esta transición no solo responde a la demanda de los usuarios, sino también a la presión por no quedarse atrás frente a competidores más ágiles y tecnológicos.
En este artículo exploramos qué bancos están ganando terreno en el sector cripto, cómo lo están haciendo, qué servicios ofrecen y qué impacto podría tener esta tendencia en el sistema bancario estadounidense.
El giro de los bancos hacia las criptomonedas
Durante años, los bancos tradicionales veían a las criptomonedas con recelo, asociándolas con volatilidad, lavado de dinero y especulación. Sin embargo, el crecimiento masivo del mercado cripto, el interés institucional y la demanda de los clientes han obligado a muchas entidades a cambiar de postura.
En 2025, ser “cripto friendly” ya no es un riesgo reputacional, sino una ventaja competitiva.
Características de un banco pro-cripto
Los bancos que están ganando terreno en este sector comparten ciertos rasgos:
- Ofrecen servicios de custodia cripto regulada.
- Permiten la compra/venta directa de criptomonedas.
- Integran productos como tarjetas con recompensas en BTC o ETH.
- Apoyan startups blockchain con financiamiento y servicios.
- Participan en pruebas de concepto para stablecoins o CBDCs.
Principales bancos pro-cripto en EE. UU. (2025)
1. JPMorgan Chase
Aunque fue uno de los mayores críticos del ecosistema, JPMorgan ha invertido fuertemente en infraestructura blockchain y ya ofrece:
- Acceso institucional a fondos de Bitcoin y Ethereum.
- Plataforma de pagos basada en su propia stablecoin: JPM Coin.
- Soluciones DeFi para clientes corporativos mediante contratos inteligentes.
2. Bank of America
Se ha movido con cautela pero constante:
- Brinda custodia de activos digitales a través de socios aprobados.
- Ha emitido reportes positivos sobre la utilidad de Bitcoin como activo alternativo.
- Integra herramientas de análisis blockchain para clientes institucionales.
3. Signature Bank (Digital Assets Division)
Tras su reestructuración, ha emergido como un referente cripto-friendly:
- Ofrece servicios bancarios completos a empresas Web3.
- Procesamiento 24/7 de transacciones cripto-fiat.
- Participa activamente en programas piloto de stablecoins bancarias.
4. Silvergate Bank (reconvertido)
Aunque enfrentó desafíos en 2023, Silvergate ha resurgido con un enfoque más sólido:
- Enfocado en servicios de liquidez para exchanges y traders.
- Plataforma Silvergate Exchange Network (SEN) mejorada y regulada.
- Alta especialización en infraestructura de pagos cripto.
5. Revolut (EE. UU.)
Aunque no es un banco tradicional, Revolut tiene licencia bancaria en varios estados y ha ganado terreno gracias a:
- Interfaz amigable para comprar y gestionar criptomonedas.
- Recompensas en cripto por compras con tarjeta.
- Servicios para freelancers y nómadas digitales con pagos Web3.

Nuevos jugadores: bancos 100% cripto
Además de los gigantes tradicionales, han surgido entidades que nacen directamente con ADN cripto:
✅ Anchorage Digital Bank
El primer banco cripto regulado por la OCC, especializado en custodia institucional.
✅ Protego Trust Bank
Ofrece servicios de trading y préstamo sobre activos digitales para instituciones financieras.
¿Qué impulsa este crecimiento?
- Demanda institucional: fondos de pensión, hedge funds y empresas ya están invirtiendo en cripto.
- Marcos regulatorios más claros: especialmente sobre stablecoins y custodia.
- Presión competitiva: fintechs y neobancos están captando usuarios cripto nativos.
- Interés de la próxima generación: los millennials y Gen Z priorizan bancos con opciones cripto.
Riesgos y desafíos
- Cumplimiento regulatorio estricto (KYC/AML).
- Gestión de volatilidad y reservas.
- Educación del cliente sobre riesgos.
- Interoperabilidad con otras blockchains y activos.
Conclusión
En 2025, los bancos que ignoran el ecosistema cripto corren el riesgo de quedar obsoletos. Los que lo adoptan estratégicamente no solo diversifican sus ingresos, sino que se posicionan como líderes de una nueva era financiera.
La integración entre banca y criptomonedas está dejando de ser una promesa para convertirse en una realidad regulada, segura y cada vez más demandada.